domingo, mayo 30

Calle José Martí.


¿Esto ya lo he visto? o ¿Esto ya lo he sentido antes? son lances muy frecuentes en el ser humano. Pero mas allá del subconsciente esta la realidad de la vida y hay detalles que simplemente nos hacen volver a vivir un pasado. Caminando desde la antigua escuela Carrales en el viejo Santiago hasta la casa de la abuela en la calle 9 era obligatorio parar en la bodega de Renato para comprar un durofrío, refrescante por excelencia y siempre de por si barato era para nosotros el mejor aliciente cuando el calor nos agobiaba. La bodega de Renato como otras tantas del pueblo estaba en una esquina, lo único diferente era que justo frente estaba el parque José Martí. Simplemente Martí era el referente para dar con facilidad con uno de estos suculentos durofríos. Hace mucho que no pruebo uno de aquellos ni que camino por la calle 9 pero son esas pequeñas cosas que nunca olvidamos. Hoy vivo muy lejos de la Bodega de Renato, más de ocho mil kilómetros me separan, pero la vida quizás por una de esas cosas que no tienen explicación me obliga a seguir teniendo a Martí como punto de referencia cuando mi pequeño hijo se antoja de un helado. En la esquina de la calle José Martí muy cerca de casa, aquí en Asturias venden helados y durofrios, en nuestro camino al mar y cuando el sol calienta estas tierras, parar en esta esquina es una obligación o sencillamente un motivo para pensar que esto ya lo he vivido.

sábado, mayo 29

La Mezcla.


En el comienzo de nuestra idea de escribir o mejor dicho de intentarlo, perseguíamos el objetivo de acercarnos y mantener los recuerdos de nuestra vida utilizando la cocina y todo lo que la rodea como pretexto para recrear aspectos cotidianos, muy someramente tratados sin profundizar demasiado, solo se trata de mantener la comunicación de una manera llana. En el primer artículo de este blog hacíamos referencia al origen de la cocina cubana; una mezcla entre lo aborigen, lo español y lo africano. Nuestra historia culinaria es o puede ser muy similar a la de otros tantos pueblos, formados en el proceso puramente evolutivo del hombre y su actuación a través de cientos o miles de años. Como hemos tratado, muchos de los alimentos que hoy conocemos tuvieron su origen en lugares muy distantes, donde radican sus centros genéticos. El sudeste asiático, la propia África y nuestra América se erigen como lugares primarios de cultivos que gracias a la mano del hombre hoy en día se desarrollan con normalidad en diferentes regiones inclusive sufriendo modificaciones que permiten su adaptación climática. En el caso particular de España encontramos una cocina muy diversificada entre regiones pero receptora en general de la influencia de otras culturas. Aprovechando que mencionamos las mezclas de culturas hoy trataremos de reflejar un tema quizás políticamente incorrecto pero con la naturalidad de la observación de nuestro entorno. Los españoles y me refiero a nuestros antepasados fueron capaces de aceptar la mezcla desde la cocina hasta la propia formación de las sociedades que se desarrollaron en sus colonias, siendo participes directos de su diversidad racial. Muchas veces hemos escuchado que el mejor invento de los gallegos fue la mulata y es quizás lo que los diferencia de otros dominios colonizadores. Sin embargo en su propio territorio el tema es bien distinto. Cuando visitamos otros países de la vieja Europa hay un aspecto que los diferencia de la España de hace solo 15 o 20 años. Lugares como el Reino Unido, Bélgica y la propia Francia mostraban una mezcla racial significativa y en su población estaban presente muchos nativos de sus antiguas colonias en primera o segunda generación. Personas que te podías encontrar ocupando cualquier posición social. ¿Que paso en España? Puede que dada la situación económica y social que vivió este país hasta hace relativamente poco tiempo no era un lugar aconsejable para buscar nuevas oportunidades. Un caso muy significativo es el de los propios cubanos. En su salida de Cuba, muchos utilizaron la llamada vía España pero solo como trampolín, aquí quedaban unos pocos casi siempre por la presencia de parientes cercanos que le brindaban cobijo y el impulso necesario para reiniciar sus vidas. Confieso con la mayor sinceridad que durante mucho tiempo al menos en Asturias no vi personas de otras razas y durante años solo estaban presentes en momentos puntuales, siempre en ferias o algún que otro evento. Hoy el tema es diferente, en los últimos años ha proliferado la presencia de extranjeros. Sin embargo aún la integración plena en la sociedad no es visible. Resulta practicamente imposible encontrar a un extranjero al menos en Asturias ocupando un puesto en el sector de la administración pública, en política o en trabajos de alguna que otra importancia, su presencia es solo palpable en el sector servicios o en la construcción. Las relaciones personales entre nativos y extranjeros existe, sin que por ello se observen familias formadas por una u otra raza. ¿Podríamos considerar que existe racismo? No lo creo, es aún muy pronto para dar ese calificativo a una sociedad que da sus primeros pasos en la pluriculturalidad. Llegará el momento en que las mulatas no sean solo un producto de la histórica colonización. Al menos hemos avanzado, ya en el mercado podemos comprar yuca, mango o kimbombo. Puede ser que como en el amor el cambio entre por la cocina.

lunes, mayo 24

La Habana Años 50 Calle 23 Vedado

Para escucharlo elimine la música de fondo.

sábado, mayo 22

Tiempo sin Tiempo.


El tren 71059 arriba a la pequeña estación del viejo Santiago, el tiempo que ha demorado desde su punto de salida puede ser una incógnita, depende de factores objetivos y subjetivos, aunque teóricamente este predeterminado. Puede que haya ido más rápido o más lento o sencillamente sea el resultado de la apreciación de cada cual. El tiempo absoluto es único, el tiempo relativo puede variar quizás sin ninguna explicación física, puede que ser el resultado de nuestra manera de vivir. La definición del tiempo en filosofía abarca no solo diferencias en la percepción del tiempo absoluto u objetivo sino de diferencias reales en la dimensión del tiempo personal. La física moderna trata de explicar la relatividad del tiempo en su ecuaciones matemáticas tomando como ejemplo las percepciones del tiempo de los enamorados aunque no podamos determinar en las variables utilizadas quien es uno y quien el otro. Después de tanta filosofía y verborrea para un guajiro de Santiago es muy fácil explicar lo relativo del concepto tiempo cuando cruzas el charco. En nuestra tierra el tiempo pasa como ese lento viejo tren, las horas son interminables y el segundo como unidad de medida tiene más milésimas. ¿Porque? la respuesta puede estar en la monotonía de lo que hacemos o en la poca diversidad de acciones que se acomenten a lo largo de un día. Aquí en la vieja Europa la cosa es bien distinta, necesitariamos días de 48 horas para solventar nuestra vida. Entre el amanecer y la noche no existe diferencias perceptibles, entre enero y diciembre los meses desaparecen y no entiendes porque tienes más canas. Los tiempos de comer en el viejo Santiago aunque fuese un simple arroz con huevo se alargaban por la coincidencia en la mesa de casi toda la familia, en las sociedades desarrolladas salvo días especiales o quizás en domingo cada uno come cuando puede y a la hora que encuentra libre. Mientras más rápido lo hacemos mas tiempo tenemos para otras gestiones y muchas veces lo hacemos en soledad, sentados en la esquina de la mesa, como un rey sin corte. Aquí las madres y abuelas no son como las nuestras que empleaban tiempo en preparar la comida o quizás para inventar que hacer. Los alimentos preelaborados y el micro-ondas son aliados del tiempo. Recuerdo cuando eramos niños, allí en el patio de la escuela Carrales sacábamos la cuenta de los años que tendríamos en el año 2000 mientras nos comíamos el Masarreal y bebíamos el refresco instantáneo con sabor a fresa, para muchos o casi todos serian cuarenta y tres. Pero cuando se es niño el tiempo es infinito, lo aprecias como algo difícil de alcanzar, hoy ya pasamos de los cincuenta y el tiempo pasa muy rápido, el mañana es el hoy y el pasado es historia.

Preciso tiempo necesito tiempo ese tiempo
que otros dejan abandonado
porque les sobra o ya no saben
que hacer con él
tiempo
en blanco
en rojo
en verde
hasta ese castaño oscuro
no me importa el color
cándido tiempo
que yo no puedo abrir
y cerrar
como una puerta
  • (Fragmentos del poema Tiempo sin Tiempo de Mario Benedetti)

miércoles, mayo 19

Las cuatro estaciones.


Nacimos en un lugar donde climatologicamente hablando no somos capaces de diferenciar las estaciones del año, alguien dijo que Cuba era un eterno verano y no deja de ser verdad, para ser honesto la primera vez que regresé a nuestra tierra después de muchos años no era capaz de comprender y sin ínfula alguna como pude vivir con tanto calor una buena parte de mi vida. Ese golpe de calor que te sacude el pecho, que te abraza los sentidos a esta altura de la película resulta difícil de aceptar. Aquí en España son muy notables las variaciones entre una estación y otra del año. Lo primero por supuesto es la manera de vestir, es tanta la variación que puedes no reconocer a una persona cercana. Al primer rayo de sol de la primavera y cuando los termómetros sobrepasan los 20ºC el despelote es general y te sorprendes al ver cuerpos esculturales semi desnudos que hasta entonces han estado ocultos en oscuros abrigos, bufandas y gorros. Otro análisis es la comida. Pedir en un restaurante un potaje o una sopa en primavera o verano es una ofensa a la inteligencia, las ensaladas y platos fríos en general ocupan el menú a servir y si pides algo caliente te miran con recochineo como dicen aquí. Por mucho que trato de recordar no soy capaz de percatarme si en en nuestras casas de Santiago se comía diferente según el tiempo que hubiese, si tengo claro que la abuela ponía sopa de entrante todos los días del año, aunque sudaras como un toro, o quizás puede haber sido una treta para encharcarnos la barriga y disminuir el hambre en tiempos difíciles . El potaje de frijoles negros era el mismo en Julio como en Diciembre y mientras más caliente más nutritivo. En fin que somos disconformes por naturaleza y nunca llueve a gusto de todos, aunque ya es tiempo de que los retoños verdes de la primavera lleguen a todos nosotros.

martes, mayo 18

Reparación de la Iglesia del Pueblo.

Desde que se pusiera la primera piedra para la construcción de nuestra iglesia en 1694 se han realizado en ella diversos trabajos de modificación y reparación, resulta cuanto menos interesante que en la circunstancias actuales no quede en el olvido.

martes, mayo 4

Ajo para el mojo.

Elemento imprescindible en cualquier cocina que se respete. Cabeza con dientes; elegante y discreto, capaz de cambiar el sabor al plato más simple. De la cocina española heredamos la predilección por el ajo, mas, que fuera de un mojo para la yuca sin su eterna presencia.
Para las abuelas Santiagueras poseer una cabeza de ajo era un tesoro, una ristra el premio gordo.
De nombre científico Allium sativum, el ajo tiene su origen en Asia Central, pero en la más remota antiguedad era utilizado por chinos y egipcios. En Grecia y Roma lo consideraban un potente afrodisiaco. En la época medieval se uso para librarse de brujas, vampiros y malos espíritus. Durante la Segunda guerra Mundial se repartia entre los soldados como remedio para las heridas. Es posiblemente la planta medicinal más estudiada, varios de los beneficios del Ajo se deben a la presencia de un compuesto llamado alicina, muy eficaz en el control de virus y bacterias. Es un poderoso antioxidante, muchos longevos han sido grandes consumidores de ajos , sobre todo en crudo. Alguien dijo que las calles de España huelen a Ajo y puede que sea cierto.