viernes, abril 12

Y LLEGÓ DE AUSTRALIA.

El concepto de globalización o aldea global se define como la integración de la humanidad a gran escala, tanto a nivel social, económico, político, cultural y tecnológico. La mayoría de nuestros padres por no remontarnos a los abuelos, nacían, vivían y morían en su ciudad o pueblo. Poseían una información del mundo muy cercana y los chismes de barrio eran su prensa del corazón.

 Quien sabia hace solo 30 años que comían los thailandes, los esquimales o los australianos. Pero el mundo, gracias sobre todo a Internet ha propiciado que la cocina y sobre todo la cocina haya ampliado el horizonte de la cultura culinaria. Los cubanos casi sin saberlo hemos sido precursores de la globalización. Hay un cubano donde menos te lo puedas imaginar y comiendo lo que en su vida pensaron comer. Nuestro desparrame por el mundo y nuestra capacidad de integración nos hace fiel reflejo del homo sapiens moderno. 

Ya he contado en otras ocasiones que durante  una larga estancia en Egipto compartí mesa y mantel con un paisano de Marianao, residente en el Cairo y comprobé con enorme satisfacción lo deliciosa que es la carne de Camello. He leído con atención que en Cuba se proponen sustituir la carne de vaca por la de avestruz. Si no fuera por lo que es, pudiéramos tomarlo como otra ocurrencia de las habituales en nuestra querida tierra, como cuando la soya pasó a ser lo mas importante en nuestra dieta. Sin embargo ojalá que se lo tomaran en serio. 

 Es oportuno señalar que en España hace una década se consideró la cría del avestruz como un negocio muy rentable, pero de más de mil explotaciones que se iniciaron hoy quedan unas pocas. Al parecer se sobrevaloro su potencial y el manejo no es tan sencillo como se pudiera pensar y su coste de producción no fue rentable por la poca carne que se obtiene de un animal en edad de sacrificio. No obstante bajo las condiciones climáticas de Cuba pudiera ser una opción mas. 

Tendríamos que agradecer al menos que el colesterol dejaría de existir en Cuba, la carne de avestruz contiene mucho menos grasas que la carne porcina o vacuna y un huevo de avestruz es mucho huevo. Ah y que no dejen la soya de lado, es la combinación perfecta y esa si que se come y bebe en la Madre Patria. No obstante nuestro pueblo merece conservar su cultura y sus costumbres y el puerco asado esta muy bueno y no vino de Australia. La globalización no siempre es positiva. 

jueves, abril 11

CADENAS ROTAS

Desde la ventana de mi cocina allí en el viejo Santiago y viendo cocinar a la abuela leía a lo lejos un cartel enorme donde se anunciaban las próximas elecciones en Cuba. 

Tendría la responsabilidad de ir a votar con la particularidad que ya sabía de antemano el ganador. La no existencia de diversos partidos políticos hacia de ese día un puro tramite social si es que se puede catalogar así. 

Las cadenas del pensamiento te las puedes poner tu mismo o te las colocan de una manera sutil que no te permiten ver más allá de tus narices. El aroma de unos buenos frijoles negros te hacen despertar de un sueño, donde la libertad de opiniones políticas y unas elecciones libres te dieran la oportunidad de ser tu mismo con tus propios valores.

Hace cinco años que no me sentaba delante de un ordenador a escribir, el ritmo de vida que se lleva no me deja tiempo a ello y hay que que priorizar tareas. Estoy en la mesa de mi cocina  pero con la salvedad que ahora a través de la ventana veo una ciudad iluminada y preparada a iniciar una fratricida campaña electoral que comienza hoy y donde cinco partidos políticos desde la extrema izquierda hasta la extrema derecha expondrán sus programas políticos al criterio de millones de ciudadanos que el próximo día 28 de abril están citados en las urnas. 

La España que conocí hace varias décadas no se parece políticamente hablando a la de hoy. Cuando pude votar en unas elecciones generales  por primera vez era quizás mucho más fácil definir hacia quien iba tu voto. Dos grandes bloques uno de izquierda y otro de derechas formaban el arco parlamentario junto con otros partidos de menos representación. El presente es muy diferente, tanto la izquierda como la derecha se han fraccionado y tanto es así que a día de hoy mas del 40 por ciento de los votantes según una reciente encuesta no tienen su voto definido.

Si hace años tenía un solo partido para votar y lo hacía bajo las cadenas impuestas hoy tengo cinco partidos y sigo tan atado como antaño aunque ya sin cadenas. Son tus propios valores los que chocan con una realidad política que te hace muy difícil saber quien te dice la verdad y en quien confiar tu propio destino.