sábado, julio 30

Toulusse, hasta siempre.

Corren tiempos difíiciles para los seres humanos, no es extraño el día en que no tengamos noticias de acontecimientos tristes, que por alguna que otra razón están relacionadas con la muerte de personas; guerras, accidentes, catástrofes o crímenes de mentes desquiciadas llenan los tabloides y telediarios de todo el mundo. Hago esta reflexión porque a veces tendemos a vanalizar o ridiculizar el sentimiento que se puede tener por la perdida de una simple mascota o animal de compañía pero la realidad te golpea cuando te das cuenta que detrás de su presencia hay una parte de tu vida que marcha con ellos. Ayer nuestro gato Toulusse falleció, después de trece años de vida compartida, no pudo soportar el paso del tiempo y su sistema renal colapso por completo. Nació en casa y lo vimos crecer junto a nuestros hijos soportando sus travesuras de felino, sus reclamos mañaneros por la comida, sus rasguños en el sofá pero su ausencia deja un vacio que duele, que te hace reflexionar hasta donde puede llegar su influencia en tu propia existencia. Hace más de 10 000 años que el hombre vive en compañía de animales. Se considera que los perros y los gatos son animales que tienen poca utilidad para el ser humano, excepto por lo que los antropólogos denominan utilidad residual. Para la mayor parte de los occidentales, la función de la mascota es precisamente la de su inutilidad para cualquier cosa que no sea el propio placer de contemplarla. A diferencia de el perro el gato crea su mundo particular del cual tu eres simplemente algo más. El gato no vive contigo tu vives con el gato, sin embargo saben expresar a su manera muy particular lo que para ellos significa aunque no sean muy poco expresivos.  Así era Tolousse orgulloso y prepotente pero al final de su vida su mirada decía más que cualquier sabiduría antropológica, se dejaba acariciar como diciendo fue un placer compartir mi vida con ustedes y nunca me olviden.

miércoles, julio 27

Ladrones sin respeto.

Pintura de la Iglesia de Santiago de las Vegas.
Obsequio de la Familia Balido
El 25 de Julio miles de peregrinos de pueblos cuyo patrón es Santiago Apóstol celebraban su día. Gracias a un mero ejercicio de investigación he podido comprobar que en la gran mayoría de zonas geográficas donde llegó la fe cristiana de la mano de los conquistadores españoles existe una ciudad o un pueblo con el nombre de Santiago.
Sin lugar a dudas dentro de estos cientos o miles de pueblos Santiago de Compostela es el centro neurálgico por derecho propio de esta devoción por el Apóstol Santiago. Sin embargo este año la celebración estuvo matizada por el robo en la catedral de uno de sus documentos más valiosos y joya indiscutible del patrimonio cultural gallego, el Códice Calixtino, llenando de incredulidad y tristeza a los peregrinos que se dieron cita y con la esperanza de que un milagro propiciara su devolución.
El Códice Calixtino es un manuscrito del siglo XII que constituyó una especie de guía para los peregrinos que hacían la Ruta Jacobea. Contiene consejos, descripciones del Camino y textos litúrgicos relacionados con el Apóstol Santiago. Su desaparición fue descubierta el pasado martes 5 de julio por los responsables del Archivo Catedralicio, quienes guardaban el original de la obra en una cámara acorazada del interior de la Catedral de Santiago de Compostela el Códice Calixtino
El Códice Calixtino, también llamado "Liber Sancti Iacobi" es un manuscrito iluminado, atribuido al monje cluniacense Aymerico Picaud, acompañante del pontífice, Guido de Borgoña, en su peregrinación a Santiago a mediados del siglo XII. Consta de cinco libros y dos apéndices escritos en pergamino.
El primer libro es litúrgico, el segundo hagiográfico, el tercero y el cuarto tienen carácter histórico y el quinto constituye una especie de guía para el peregrino. Este último libro es el que alcanzó una mayor celebridad, al incluir consejos y descripciones útiles del Camino para quienes realizaban la Ruta Jacobea.
La gran afluencia de peregrinos en la Edad Media en el Camino de Santiago desde Francia hizo necesaria la elaboración de un tratado que recogiese información útil que sirviese de ayuda a los caminantes. En aquel tiempo, el Camino de Santiago era una ruta insegura debido a los frecuentes asaltos que sufrían los peregrinos por parte de ladrones y pícaros. El Códice se convierte así en la primera guía para el peregrino, ya que contiene numerosas descripciones, tanto de las rutas como de las obras de arte y las costumbres de la gente que vivía en los pueblos del recorrido del camino.
Al parecer, el Códice fue usado sin interrupción, al menos, hasta mediados del siglo XVI; después dejó de interesar y cayó en el olvido durante años. A finales del siglo XIX, el canónigo archivero de la Catedral de Santiago de Compostela, Antonio López Ferreiro, redescubrió el Códice Calixtino y volvió a utilizarse, convirtiéndose en una de las joyas de la identidad cultural gallega.
                      Paso el 25 y el milagro no ocurrio, continua la investigación.


sábado, julio 16

el Mango existe.




La semana pasada mi cuñada asturiana regresaba de un viaje por nuestra tierra. Durante dos semanas vividas en nuestro pueblo, caminando por nuestras calles y viviendo la realidad de sus vidas pudo apreciar las bondades, defectos y virtudes de nuestra gente. Su propia personalidad le ayudo a disfrutar de lo mucho y de lo poco y a valorar lo que se tiene cuando de comparar se trata. Pero si algo hace brillar sus ojos es recordar el momento de saber que algo como un simple mango podía existir.



Sin temor a la equivocación, pudiera suscribir la tesis de que Santiago de las Vegas es el territorio de Cuba donde se pueden encontrar la mayor diversidad de variedades de mango, en relación a su superficie. Desde la temprana fecha de 1909 los viveros existentes en Santiago de las Vegas desarrollan las técnicas de injertos como método de reproducción agámica propiciando una rápida y considerable difusión de nuevos cultivares. Desde el sencillo mango filipino hasta las más llamativas variedades llamadas de mesa como el Hayden, Super Hayden. San Felipe y Florida y las siempre jugosas mangas blancas y amarillas. Para muchos el mango es la reina de las frutas tropicales, su color, aroma y sabor así lo manifiestan. El mango de nombre científico Manguífera indica L. es oriundo del sudeste asiático, su cultivo es milenario. En las Sagradas Escrituras ya se menciona y para los hindúes es una fruta sagrada, llegando a considerar que es una transformación de "Prajapati, señor de las criaturas" . A nuestra América llegó de la mano de los colonizadores, posiblemente con los viajes entre Las Filipinas y México. En La Florida la primera plantación perenne data de 1861.