jueves, abril 26

Para un padre amigo.


Ismael Balido en Asturias
Junio del 2008

Hoy hace tres años que falleció nuestro estimado amigo Ismael Balido, no encontraría nuevas palabras para expresar nuestros sentimientos. Comparto de nuevo lo que pude escribir después de lo ocurrido.

Por estos días hace un año mi casa de Asturias fue más Santiaguera que nunca, Toda mi familia fue un poco más feliz al recibir la visita de un hombre entrañable, de esos que dejan huella a su paso. Elegante en su presencia y en cada palabra que pronunciaba, amigo de la cordura y del saber estar, sabio por naturaleza y eterno enamorado de su pueblo. Confieso sin ningún asomo de vergüenza que me resulta difícil escribir y expresar un sentimiento del cual hice a él participe y hoy humedece mis ojos. Verle sentado a mi mesa fue sentir de nuevo a mi padre, al cual nunca más pude ver. Ismael Balido y él compartieron niñez y juventud en el viejo Santiago, ambos eran muy parecidos en el físico y sobre todo en el respeto a la familia, al comportamiento humano y sobre todo al pleno ejercicio de la aplicación del sentido común como filosofía de vida. Después de aquel encuentro con el pasado y los recuerdos mantuvimos una comunicación diaria y jamás pronunció una frase ni una palabra que no llevase un mensaje de cordura y deseo infinito por el bienestar de sus amigos y de su pueblo.


Amante de la buena cocina, no escatimo elogios para agradecer lo que modestamente podíamos ofrecerle en nuestra casa. Creo que nunca antes habíamos puesto tanto amor en la cocina para agasajar a un invitado y de ello nos queda su recíproca gratitud.




Quiero que sepas Ismael que extraño mucho tus saludos mañaneros, y el hasta mañana de todos los días, que ya nada es igual, algo se rompió, la vida te jugo una mala pasada. Gracias por haber brindado a mis hijos y esposa momentos de infinita alegría, ha sido un año especial en nuestras vidas. Hace poco me decías que para ti era un hijo más que había regresado a casa por navidad y te aseguro que siempre estaré dispuesto a volver.




Gracias viejo
Giraldo, Rosa, Alba y Christian