viernes, julio 24

La Malta nos sobrepaso.

No resultaría un disparate considerar que cualquier Cubano podía entrar en el libro Guinness de Records como mayor bebedor de Malta. Considerada como una bebida refrescante no alcohólica era fabricada y consumida en Cuba como otro de los tantos refrescos que existían, quizás en un menor grado. Sin embargo durante la década de los años 70 y 80 la malta llegó a nuestras vidas de una manera desmesurada y enloquecedora. No había una población sin una maltera y en la Ciudad de la Habana te las encontraba por doquier. En nuestro Santiago la antigua Dominica de la Doble-Vía de la noche a la mañana se convirtió en nuestro santuario de la malta. Dos tanques o pipas fueron colocadas en el centro de aquella barra ovalada y aquellos vasos pelga eran nuestra devoción. Cuando asistiamos a un estreno de alguna película lo hacíamos por lo general a los cines Infanta o Astral por la comodidad de tener cerca la parada de la 76 y era habitual detenerse a la salida de los cines en las malteras de la calle Infanta, donde después de una "pequeña colita" nos deleitábamos con esta bebida de los dioses y si era acompañada de aquellas extraordinarias croquetas pega cielo aún mejor si cabe.
La Malta a pesar de su origen alemán tiene mucho arraigo en todos los pueblos caribeños, asi como también en algunas zonas de África y el sudeste asiático. En Europa en general no es habitual su consumo. En España, es una total desconocida y me costo tiempo encontrarla, hasta que un buen día en un pequeño rincón del Corte Ingles di con ella, estaba sola, desamparada como esperando a su príncipe azul.

La malta es el producto de extracción e hidrólisis enzimática de la cebada malteada, al cual se agregan azúcares de fácil asimilación, como la glucosa y fructosa, tras lo cual es sometido a un proceso de maduración en frío durante un período mínimo de una semana. Posteriormente es filtrado, carbonatado y envasado. La malta contiene concentraciones apreciables de vitaminas del complejo B, tales como: Tiamina, Riboflavina, Niacina, Piridoxina, Ácido Pantoténico, Biotina e Inositol, requeridas por los niños en grandes cantidades para su normal crecimiento y desarrollo.

Estas vitaminas intervienen en el metabolismo de muchas reacciones esenciales. Tienen como rol, entre muchos otros, proveer de energía al organismo, básicamente degradando los carbohidratos en glucosa, además de ser importantes en el metabolismo de las grasas y de las proteínas.

Aunque para algunos la palabra malta se asocie a una isla del mediterraneo o a la Sagrada orden de Malta, para un cubano es recordar nuestro vaso de pelga en la mano, o aquel vaso de malta con leche condensada o ya se le olvido a usted.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

YO PIENSO QUE