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| Pepino- nombre científico Cucumis sativus |
Pasar del anonimato a la palestra informativa puede tener su origen en innumerables factores, pero sin lugar a dudas el más cuestionable e ingrato es que alguien de manera burda, simplista o sencillamente estúpida te señale con el dedo y diga de ti lo que le venga en gana sin tener en cuenta el terrible daño que te pueda hacer. Esta afirmación le puede ocurrir a cualquier ser humano, sin embargo esta vez la víctima ha sido una verdura que por sus propias características e importancia merece todo el respeto de aquel que tenga un ápice de inteligencia. El viril y elegante pepino español paso de su huerta a las principales portadas informativas gracias a la prematura, y negligente opinión de una funcionaria alemana, que lo acuso abiertamente y sin análisis previos de ser la fuente de trasmisión de una cepa desconocida y muy peligrosa de la bacteria Escherichia coli causante al parecer de el fallecimiento repentino de varias personas en el norte de Alemania.
La precipitación de la responsable de salud de Hamburgo en culpar al pepino español trajo consigo un bloqueo inmediato de este y de otros productos hortícolas de procedencia española en Alemania y otros países de la comunidad europea con la consiguiente perdida millonaria para los ya maltrechos agricultores españoles. Por suerte y aunque el daño causado costara mucho en repararse el pepino español quedo libre de pecado y las últimas informaciones certifican que el origen de este patógeno se encuentra en brotes de soja provenientes de una granja agrícola de la Baja Sajonia dentro de la propia Alemania
El pepino pariente cercano de la calabaza, el melón y la sandía es originario de las regiones tropicales del sur de Asia, siendo cultivado en la India desde hace más de 3.000 años. De la India se extiende a Grecia y de ahí a Roma y posteriormente se introdujo en China. El cultivo de pepino fue introducido por los romanos en otras partes de Europa; aparecen registros de este cultivo en Francia en el siglo IX, en Inglaterra en el siglo XIV y en Norteamérica a mediados del siglo XVI.
El pepino ocupa el cuarto lugar en la producción mundial de hortalizas solo superado por el tomate, la col y la calabaza. Su consumo en fresco es importante pero aun lo es más encurtido. En Cuba el consumo de pepino en ensaladas me atrevería a considerar que no era preferido por muchos. El empleo del pepino encurtido en la elaboración del típico sandwich cubano forma parte de nuestros recuerdos culinarios más enraizados y nos acelera las glándulas salivares solo de recordarlo.
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